“Acosada”, ese alegato moral francés firmado por Anne Le Ny que, a priori, suena más a serio drama social que a comedia involuntaria. Y aunque la película tiene buenas intenciones, tiene ese “toque conciencia” tan del cine europeo que te obliga a mirarte al espejo y pensar “quizá debería ser mejor persona”.

La moraleja se capta rápido: amor, engaño, redención… todo bien empaquetado. Pero luego llegas a la trama y piensas: “¿En serio?”

Como por ejemplo, algo que nadie es capaz de creerse, engañar a Omar Sy con José García

Vamos a ver. Omar Sy: este tiarrón, guapo, simpático, carismático, con sonrisa que ilumina a todo al que está por debajo de su altura. Vanesa Paradis: su ex, y además una Isabel Adrians moderna, o sea, alguien que ha convivido con el encanto y el talento. Y les meten en medio a José García, con una expresión de “¿qué cojones estoy haciendo aquí?”. ¡Por favor! ¿De verdad esperan que creamos que la protagonista lo cambia todo por un tipo que lo más sexy que tiene es mmmh, qué tiene este hombre en la película? Venga, eso no se lo cree nadie.

Y qué decimos de los protagonistas secundarios como la hija, la hermana… son de relleno total.

Tiene el drama familiar de turno: una hija con constantes “¡mamá!”, una hermana con consejos episódicos, que aparecen, dicen algo de relleno… y se esfuman hasta el siguiente acto. Como cuando en una serie meten a un personaje “para darle dinamismo” y al segundo capítulo ya has olvidado su nombre. ¿Qué aportan aquí aparte de ruido de fondo?

Pero si tenemos que hablar de la trama en sí, hay que comentar el final que es totalmente surrealista y manido

La última escena es un auténtico despropósito digno de sketch de humor negro. La protagonista, secuestrada, maniatada a… nada (sí, con las manos sujetas a ninguna parte), con cinta de carrocero en la boca (como si hubiera raptado al diseñador de Ikea). Y tú, ahí sentado, pensando: ¿Dónde está el suspense la película?, ¿La tensión dramática?, “¿en serio esperáis que me crea esto?”.

El reparto hay que decir que actúan y encajan sus papeles con más que dignidad, mostrando el reverso moral que Anne Le Ny quiere mostrar : temas como la infidelidad, la culpa, la redención, la familia… pero lo acaba de cuajar.

“Acosada” tiene productos de lujo –buena intención, actores con nombre– pero una dirección y selección de tramas que se tambalean.

Moraleja final: una fábula moral, elegante que, si te la tomas en serio, te deja con cara de “pero esto va en serio…?”.