Y es que Cesc Gay no da puntada sin hilo, y con Mi Amiga Eva, remata esta maestría que explica sin decir, que enseña mientras narra, sobre el amor y el desamor, las parejas, las personas y la vida

Porque lo que no está planteando esta trama es algo tan sencillo como complicado: escogerse a uno mismo

Tener una vida estable y segura no es suficiente, necesitas la chispa de la vida, necesitas esas cosquillas que te da la ilusión y el volver a sentir

Y es que, que haya una tercera persona no es el desencadenante, es solo la afirmación de que ya no sientes lo que deberías y no es justo para nadie en esta ecuación de sentimientos.

Y es un paso difícil, pero honesto, honesto con tus sentimientos y con los que no sientes ya, y aunque persistes y quieres volver a recuperar, tiene claro que ya no con esa persona, porque ya dejó de funcionar y ya no funcionará más.

Además, habla de algo que cada vez es menos tabú, como es la edad adulta en una mujer, así como su cambio hormonal a la menopausia.

Sin olvidar las relaciones personales no amorosas, como son la de los amigos, estos con los que puedes llorar, emborracharte o simplemente estar en silencio disfrutando de una copa de vino, y por supuesto, de una misma por encima de todo.

Y Cesc Gay ha escogido a la mejor actriz para dar vida a tanto sentimiento, a Nora Navas (Eva) y planteado desde la comedia, sin drama ni lágrimas, sino con una sonrisa que esconde tanto como dice.

Y el elenco, imposible no imaginarse a Rodrigo de la Serna, Juan Diego Botto, Àgata Roca, Fernanda Orazzi, Francesco Carril, Marian Álvarez, Miki Esparbé, Mariona Pagès como los que orbitan en la vida de la protagonista.

Y por supuesto los ambientes, los lugares, esa atmósfera barcelonesa con los cines Verdi, Gracia de fondo y, cómo no, una librería cómo encuentro casual y el mundo del libro como el vehículo de comunicación.

Si eres fan de este Cesc Gay, por supuesto que has de comprar tu entrada ya.