O cómo no sucumbir a dos jovencitas en tu puerta que te quieren a ti y sólo a ti.
Evan (Keanu Reeves), es un arquitecto y padre de familia, que ha de acabar un proyecto de manera urgente y no puede acompañar a su mujer e hija a una escapada familiar. En su soledad de su casa, llaman a la puerta en una noche de tormenta, dos jovencitas se han perdido y buscan cobijo y poder hacer una llamada. Evan las deja pasar, metiendo la tentación en la casa, lo que pasa es que no sabe qué es lo que le espera después,
Ingeniosa y práctica lección de moral para la infidelidad, con grandes toques de humor, y humor negro y pesado, tal como nos tienen acostumbrados los dos grandes del género gore, Eli Roth y Nicolás López.
Una Keanu que como siempre está en su línea, y ya la diosa del director Lorenza Izzo, acompañada de la gloriosa y sensual Ana de Armas.
Sin duda, una metáfora al «te encuentras en la puerta de casa pizza gratis», pero a qué precio y valoras si realmente vale la pena.
Un cruel y divertido film que hay que disfrutar sin duda alguna.