O cómo sobrevivir a un profesor psicópata en una trampa mortal en tu propia escuela.
Hasumi es el nuevo profesor de inglés en un selecto instituto japonés, es joven, atractivo, guapo, se interesa por los alumnos, empatiza y bromea con ellos, es próximo a los diferentes tipos de estudiantes y abierto de mentalidad. Hasumi convive con otros profesores, más conservadores, más mayores y obsoletos. Es el profesor ideal, el que suspiramos al ver o cuando entra en la clase, al menos esa es la imagen que le interesa mostrar para esconder su verdadera naturaleza … qué es lo que esconde…? Esconde a un sangriento psicópata con ansias de dominación y destrucción, elabora un malévolo plan conviertiendo una fiesta de instituto en la más sangrienta de las matanzas juveniles.
Cómo no, Takashi no podría decepcionar a su sector de público gore, y de un film inocente, romántico y juvenilmente alegre le da la vuelta para convertirlo en una película sangrienta, cruel, y muy maligna.
Con tintes que nos recuerda a la sangrienta Carry o a la batalla a muerte en Battle Royale, es una película que mezcla, además de lo antes comentado, la crueldad a la que nos tiene acostumbrados a soprender, esa exquisita maldad, que hace que esperamos con ansias esa diabólica mirada del asesino, el que contempla con gran felicidad y enorme satisfacción cómo su víctima expira el último aliento de vida entre horribles sufrimientos o disfruta con una repentina muerte en la que la víctima escapando de su agresor, se encuentra con una muerte súbita, violenta que le arranca la vida ante una expresión de horror y terrorífica sorpresa.
Me sorprendió mucho los colores tan brillantes, oscuros y contrastados que ha usado en este film, puesto que choca con otros films de similares caracterísitcas, es cierto por eso, que ayuda a darle más dramatismo a las situaciones no sólo por las sangrientas escenas, sino que ayuda en la sensación de agobio, miedo y desesperación en los personajes.
Con un final completamente abierto y tiende fácilmente una mano al rodaje de una segunda parte, tal vez una precuela explicando la historia del psicópata o tal vez una segunda parte, igual o más cruel que ésta. Pero claro es fácil dejar un final abierto así y no cerrar ni conclusiones ni historias, dejándonos con intrigas y con ganas de saber más, qué pasará, quién sobrevivirá para explicar lo ocurrido, quién dará caza a quién…
Película fácil, sin grandes argumentos, sin grandes pretensiones, aunque no es un film que sea muy original o lleve a cabo un argumento pionero, es sin duda sorprendente, tanto por sus muertes como por las ideas sangrientas llevadas a cabo.
Si además de gustarte el cine oriental y sus acostumbradas sobre actuaciones y expresiones tan de ellos, eres fan incondicional de Takashi Miike, es sin duda alguna un film ultra recomendable, para disfrutarlo como el asesino o para sufrirlo como uno de los alumnos.