O como el bulling y la homosexualidad son tan tremendamente tratados en Saúl.

Un joven vive su homosexualidad en secreto, hijo único de una mujer con problemas sentimentales. El joven acude a un instituto sólo masculino, donde la educación es muy rígida y el castigo hacia lo poco convencional sancionado con mucha facilidad. El problema viene cuando el joven se enamora desesperadamente del chico duro de la clase, del que apoya las palizas a los que ellos propios marginan o creen diferentes.

Creo que está muy bien ideada y no quiere ni posicionarse ni plantearlo como drama. Aunque nos muestra muchas miserias familiares de cada uno, y diferentes y asquerosas formas de ser, creo que denuncia en voz pasiva esta repulsión que aún sufren en muchos más sitios de los que se cree.

Rodada en parajes muy usuales, bonita banda sonora, es un film agradable de ver y que te pone de mala ostia la incomprensión y el miedo porque algunas personas no sigan lo que ellos creen que es lo estándar.