Tras los últimos asesinatos de Ghostface, los cuatro supervivientes abandonan Woodsboro para dar comienzo a un nuevo capítulo en sus vidas. Pero lo que no contaron es que serán encontrados …
Hacia falta alargar la secuela de Scream!? No pero por suerte sigue creciendo la factoría y nos da cosilla entre asesinato y asesinato. La brutalidad, violencia, sangre y trama es tan irreal como los actores, por eso nos encanta.
Con las apariciones de las ya conocidas hermanas Carpenter (Melissa Barrera como Sam Carpenter y Jenna Ortega como Tara Carpenter) sumamos las caras conocidas de Hayden Panettiere, Dermot Mulroney, Josh Segarra, Tony Revolori, Skeet Ulrich y Courteney Cox entre otras caras conocidas.
Lo que está claro es que además de continuar con la tradición de ser un slasher dentro de otro slasher, ese meta cine immersive e ironizar de forma continua sobre el cine de género, hay que otorgarle que es todo un homenaje a las anteriores, realizando un gran repaso a todos los asesinos y todas las víctimas, así como objetos de toda la saga Scream.
Los actore pues dejan tanto que desear en sus actuaciones como las tramas sin sentido e irrisorias, cogidas con pinzas, con algunos planos absurdos e inundaciones de cuchilladas que los que la reciben salen caminando por su propio pie.
Sin duda alguna, es la más slasher de la saga.
Por cierto, las escenas post crédito… vaya tomadura de pelo…