Jackie está decidida a triunfar como culturista y se dirige a Las Vegas para participar en una competición. En su camino, pasa por un pequeño pueblo de Nuevo México donde conoce a Lou, la solitaria gerente del gimnasio local. El padre de Lou es traficante de armas y lleva las riendas de un sindicato del crimen. Jackie y Lou se enamoran. Pero su relación provoca violencia y ambas se ven inmersas en las maquinaciones de la familia de Lou.

El nuevo film de Rose Glass, la directora de la inquietante Saint Maud.

⭐️ ⭐️⭐️

El tráiler nos vende una película llena de acción violencia escaramuzas con la mafia de la armamento en un una ciudad o pueblo de los 80.

Pero nada más alejado de la realidad, que me ha parecido una mezcla de Réquiem Por Un Sueño, sumando el personaje femenino de She-Hulk, con pinceladas de negocios oscuros sin determinar.

Varios puntos son los que me hacen que flojee la película.

El principal, es la actuación de Kristen Stewart, su formación actoral es muy peculiar y característica desde su debut en la saga de los vampiros, Una actuación que le cuesta mirar de frente, siempre retraída, y con cara de circunstancias. y a mí es una interpretación que no me va. Y este caso, no es una excepción.

Ed Harris haga el papel que haga siempre se va a comer la pantalla, y como acostumbra a pasar, le dan un papel muy acorde a varias interpretaciones que hemos visto de él, un mal padre que vela por el negocio, y antepondrá lo que sea y a quien sea para que todo salga según sus intereses.

Katy O’Brian, la joven amante de las artes marciales, está claro que para esta película ha puesto especial énfasis en el trabajo de su cuerpo, y los resultados a la vista están. Su actuación es más que correcta e interpreta a una loca de los esteroides y del culturismo propios de la época.

Y los secundarios como Dave Franco, Jena Malone o Anna Baryshnikov, hacen que se complemente bien la historia principal, uniendo de forma lógica las diferentes tramas, haciendo que el espectador sienta diferentes emociones y empatías por ellos.

El grano y el color con el que está filmada la película, es un gran acierto para sumergirse en esta época, dando la sensación de estar realmente viendo una grabación de esos años, así com las luces rojas tan típicas del cine ochentero, también presentes en momentos clave de la película.

La decoración, atrezo y vestuario, acompañan con muy buen ojo esa continuidad y aire de la década de los 80, muy bien llevada a pantalla.

Pero entonces qué es lo que no me funciona?

Las expectativas.

Creía que venía a ver la carrera asesina por la desvinculación de una peligrosa familia de traficantes y me he encontrado una historia de amor y supervivencia entre una pareja, que al final resultan estar bastante jodidas de la cabeza.

El tinte que adquiere hacia el final de la película, se tiñe de un sin sentido donde has de comprarla y ya, no le das vueltas y te lo tragas, todos los allí presentes nos dejó con risas de WTF? por la extraña decisión de la directora elige hacia el papel de Katy O ´Brian.

Poco a poco se va desgranando situaciones ácidas y humor negro, un trampantojo, la familia mafiosa y los tintes de film peligroso se van desvaneciendo, se convierte en un thriller pasado de vueltas, una caricatura de los 80´s con esos peinados y pelucas, esa fiebre por el gym que surgió y la nicotina como elemento normalizado en todas las áreas y momentos del día, tan prohibido ahora.

Y a pesar de toooodo esto, la recomiendo porque es una experiencia verla y disfrutarla como tal, y no esperar una salvaje huida de la familia mafiosa: