Don Jon, de Joseph Gordon-Levitt.



O como el garrulismo y el visionado de porno continuado pueden distorsionar nuestra percepción en las relaciones reales.

Jon (Joseph Gordon-Levitt) es un atractivo joven soltero al que le gusta cuidar tanto su cuerpo como su vestuario, alto consumidor de porno y seguidor de las tradiciones familiares, ir al sermón del domingo y la posterior comida en familia, reunidos frente al televisor viendo el deporte y hablando de cosas insustanciales. Amigo de sus amigos y la fiesta, para él ligar y el sexo es necesario pero el problema es que nunca llega a satisfacerle tanto como el porno que consume. Hasta que conoce a Barbara (Scarlett Johansson), una joven atractiva y muy provocativa, asentada en valores típicos. La vida de Jon cambia de pronto, no sólo por tener novia sino por lo que ella le exige que sea.

Divertida comedia pero que refleja un problema cada vez más común en los jóvenes estadounidenses, en la que el visionado de tanto porno infla y distorsiona la realidad, la verdadera situación sexual se ve frustrada por las falsas imágenes placenteras del cine porno. Y cada vez la insatisfacción va siendo mayor y las relaciones de peor calidad.

Curiosa la imagen de los personajes, representando vidas vacías, garrulos que quieren una vida típica, una vida de manual porque es lo que se impone, es lo fácil, es la manera fácil de vivir sin tener que pensar, sólo reproducirse, tener un guapo y rico marido que te mantenga y tener una perfecta casa llena de descendencia y cabezas vacías.

La metafórica figura de Juliane Moore, una atractiva madura marcada por una tragedia familiar, representando la razón, el por qué, plantarse ante la vida corriente y dictada, luchar, ir a contra corriente, disfrutar siendo tú, tener tus propios valores y vivir el día a día como sino hubiera un mañana.

Me sorprendió una película tan crítica y a la vez tan sutil, sin mentiras, clara, sencilla pero sin escupir verdades a la cara y sin ofensas.

Divertida las escenas en las que Jon se confiesa con el cura contándole mentiras para que con todos los Ave Marías y Padres Nuestros que le castiga rezar los traduce en el tiempo para medir las series cuando hace ejercicios en el gimnasio.

Bonita la parábola, que al crecer el personaje, ver más allá de su casa, familia y amigos, explorar nuevas experiencias, sitios y salir de su zona de confort, cuando va al gimnasio en vez de machacarse a pesas mientras se mira en el espejo, individualmente y de forma narcisista, cambia y pieza a jugar a basten, deporte en equipo, en el que compartes y forms parte de un objetivo que no eres tu, sino que todos.

Creo que es una preciosa historia para visionar, para ver cómo sería si un personaje no crece, cómo sería que vivirá una vida que no es la que quiere, que puedes ver cuando crece todo lo que ha cambiado en su vida, puedes comparar con el cómo hubiera sido y cómo está siendo.

Muy recomendable y agradable de ver, graciosa de ver en el sentido al ver a estos actores convertidos en garrulos y actuando como tales. Pero muy sensible en tramos vitales en los que ves qué pasa con la evolución de las personas cuando crecen.

Os dejo el reparto de IMDB.

Por supuesto el trailer

Un comentario sobre «Don Jon, de Joseph Gordon-Levitt.»

  • Yo la vi hace tiempo, al poco de salir en los cines en España.
    La verdad es que no se hace pesada, es entretenida y fácil de seguir, pero me esperaba más de su primera película como director.
    Me llamó más la atención el ver a los actores en plan cani/choni que lo que es la película en si, la verdad.

    Un abrazo!

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