Acabo de salir de ver ‘Last Stop in Yuma County’, y ha sido una película que me ha dejado muy sorprendida. No esperaba  mucho la verdad, ya que no había oído hablar en absoluto de ella antes, pero ha sido una gran y grata sorpresa.

La película cuenta la historia de un vendedor ambulante de cuchillos que se ve obligado a parar en una pequeña cafetería de un pueblo remoto tras quedarse varado en medio de la nada. Allí, se convertirá en víctima de una violenta toma de rehenes por parte de dos ladrones de bancos que están huyendo tras su último golpe.

Con poco más de 70 minutos de metraje, Last Stop in Yuma County es una película intensa y adictiva que mantiene al espectador en vilo desde el principio hasta el final. La tensión es constante y los personajes están muy bien logrados.

La atmósfera de la película es opresiva y asfixiante. La pequeña cafetería, situada en un pueblo remoto y deshabitado, parece un lugar ideal para que ocurra algo terrible.

Un más que recomendable film para disfrutar de una película, concisa, que no mete metraje ni historias de más para alargar innecesariamente, las historias se cierran y todo el conjunto hacen que la tensión, los nervios y la atención sean un constante en el espectador.

La película tiene muchos tintes a Tarantino, con su violencia explícita, diálogos ingeniosos y un humor negro con situaciones de mala suerte. Sin embargo, también tiene su propipersonalidad y logra crear un universo propio que resulta inquietante y fascinante con las tramas que se van hilando de forma tan natural que la madeja es increíblemente compleja con tan poco sitio.

Podria considerarse un western moderno, en el que los protagonistas son víctimas y ejecutores.

Y el final … qué finalizo!!!

En definitiva, ‘Last Stop in Yuma County’ es una película muy recomendable para los amantes del cine tarantínico y los westerns modernos .